Las Rutas Hidráulicas de Porreres consisten en cuatro rutas de forma circular que se recorren por caminos públicos del municipio y que proponen la visita a diferentes bienes de naturaleza hidráulica como son los pozos públicos. Estos pozos, elementos imprescindibles, necesarios a la vida diaria de la agricultura y la ganadería de siglos pasados, forman una red pública estratégicamente repartida por toda la campiña del municipio.
Desde hace un tiempo, su utilidad como puntos de recogida de agua es prácticamente nula, pero realizan la función básica de recordarnos el pasado. En la década de los 90 ya se realizó una importante restauración de estos elementos patrimoniales, gracias a la iniciativa del entonces concejal de Cultura, Rafael Picornell.
Según un estudio realizado por los historiadores María Barceló y Bartomeu Servera (Los pozos públicos de Porreres: un patrimonio a conservar), la falta de torrentes en Porreres provocó que proliferase la construcción de pozos generalmente ubicados en zonas rurales, aunque muchos de estos han terminado formando parte del casco urbano a medida que éste ha ido creciendo.
El más antiguo de los pozos de Porreres es el pou Nou, construido en 1380 y que ha sido el último en ser restaurado. De la misma época es el pou d’Amunt (1405), que quedó incorporado en el edificio del matadero.
Uno de los pozos más emblemáticos es el de Es Pagos, ubicado en la carretera de Vilafranca, ante la propiedad del mismo nombre. En la carretera de Campos, en el camino de Son Pau, encontramos el pozo que recibe este mismo nombre. Del pou Celat, el camino de Son Mesquida, ya se tienen noticias en 1576; la parte superior del brocal tiene un cierre en forma de celda y dos abrevaderos adosados. También en un desvío de la carretera de Felanitx encontramos el pou de Betlem, que también tiene su cierre en la parte superior.
El recorrido, ya sea a pie o en bicicleta, nos permitirá, además de conocer cada uno de los pozos, disfrutar del recorrido en un entorno preferentemente agrario, haciendo camino a través de un paisaje que lucha para mantener su valor rural y ecológico .
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